Las contraventanas suelen estar hechas de uno de estos cuatro materiales: El PVC, el aluminio extruido y la buena y vieja madera son los más utilizados. Sin embargo, la alternativa más duradera y ligera es la cuarta: aluminio perfilado, relleno de espuma rígida de poliuretano, que desempeña un papel importante en el rendimiento global de la persiana.
Como parte de una estructura sándwich, el poliuretano proporciona la rigidez y la estabilidad dimensional necesarias con un peso mínimo. Al aumentar la densidad, puede reducirse aún más el grosor de la hoja de aluminio, comparativamente cara y consumidora de energía, lo que a su vez también contribuye a reducir el impacto medioambiental de la contraventana. Ofrecemos una amplia cartera de productos para cubrir las necesidades del mercado, desde líneas de producción estándar hasta necesidades especiales como densidades más altas o perfiles de reacción diferentes.